PRONUNCIAMIENTO A LA OPINIÓN PÚBLICA DEL CONSEJO JURISDICCIONAL DE LAICOS CATÓLICOS DIÓCESIS DE POTOSÍ

03.09. 2019//Comunicador Pastoral//Ante el lamentable suceso en la Chiquitanía y la falta de reacción inmediata de nuestras autoridades, el Consejo Jurisdiccional de Laicos Católicos en la Diócesis de Potosí denuncian con un pronunciamiento público la irresponsabilidad gubernamental al emitir el decreto supremo nº 3973 que ha desencadenado este desastre, un número indeterminado de pérdidas en especies animales y vegetales, constituyéndose en un daño irreparable para el Pulmón del Mundo, esto ha causado el reclamo e indignación en nuestra población.

PRONUNCIAMIENTO A LA OPINIÓN PÚBLICA
DEL CONSEJO JURISDICCIONAL DE LAICOS CATÓLICOS
DE LA DIÓCESIS DE POTOSÍ

¡Todos somos Iglesia (Una comunión universal)!

“Las criaturas de este mundo no pueden ser consideradas un bien sin dueño: «Son tuyas, Señor, que amas la vida» (Sb 11,26). Esto provoca la convicción de que, siendo creados por el mismo Padre, todos los seres del universo estamos unidos por lazos invisibles y conformamos una especie de familia universal, una sublime comunión que nos mueve a un respeto sagrado, cariñoso y humilde. Quiero recordar que «Dios nos ha unido tan estrechamente al mundo que nos rodea, que la desertificación del suelo es como una enfermedad para cada uno, y podemos lamentar la extinción de una especie como si fuera una mutilación»[67].” (Encíclica LS. 89)

El llanto silencioso del Chaco y la Chiquitanía

Con mucha tristeza, indignación, preocupación e impotencia, los últimos días todo boliviano ha llorado viendo como el fuego consume gran parte del bosque seco enclavado en el Chaco y la Chiquitanía Boliviana, es por eso que en magna asamblea del Consejo Jurisdiccional de Laicos de Potosí, emitimos este manifiesto.

1. Un evento catastrófico, dada nuestra condición de profetas, reyes y sacerdotes a través del bautismo, los laicos haciendo eco de las sabias palabras de nuestros obispos y el Papa Francisco quienes nos instan a denunciar las injusticias que se viven en nuestra sociedad. En este sentido, creemos que el trágico incendio causado por manos humanas, que sopesa nuestra amazonia, pudo ser evitado si las normativas dictadas recientemente por el gobierno central, nos referimos concretamente al decreto supremo nº 3973, hubiera sido cuidadosamente revisado y evaluado. Tal como el Papa Francisco nos dice en la encíclica “Laudato Sí”: “si los hombres van desnudando a la tierra de sus bosques naturales o destruyendo sus zonas húmedas, contamina el agua, destruyan la diversidad biológica en la creación divina; un crimen contra la naturaleza es un crimen contra nosotros mismos y un pecado contra Dios” (numeral 8).
2. Lenidad en la toma de acciones y decisiones, otro hecho denostable que causa asombro es la falta de reacción de nuestras autoridades, las acciones de contingencia fueron tomadas cuando ya bosques enteros están arrasados (como el caso del área protegida Ñenbi Guasu), los incendios causan un número indeterminado de pérdidas de especies animales y vegetales, constituyéndose en un daño irreparable a este Pulmón del Mundo y esto ha causado el reclamo e indignación en nuestra población.
3. Denuncia, como laicos católicos denunciamos la irresponsabilidad gubernamental al emitir el decreto supremo nº 3973 que ha desencadenado este desastre porque autoriza “quemas controladas” dentro esta reserva ecológica, la temeridad de esta norma legal, queda en evidencia cuando en pasados días se escucharon afirmaciones de ministros de Estado en medios de comunicación, manifestando que los chaqueos, quemas y distribución de tierras en la zona afectada no se detendrán, esto sumado a declaraciones del mandatario del Estado, anunciando la construcción de una represa en Roboré, evidencia el completo desconocimiento del delicado ecosistema del lugar, y, siembran serias dudas sobre los verdaderos motivos de los recientes asentamientos humanos en la zona amazónica, y develan la intención de convertir zonas forestales en agrícolas sin razones fuertemente valederas, esto daña a “la Hermana Madre Tierra” irremediablemente, hecho al que mostramos nuestro completo y airado rechazo.
4. Reconocimiento de acciones, desde esta palestra expresamos nuestro agradecimiento a todas las personas que desde el principio y denodadamente combaten el arrasador incendio, procurando salvar algo de lo que en otros tiempos fue el bosque seco mejor conservado. No dejamos al margen y pese a la tardanza, todos los esfuerzos que se hacen desde instancias gubernamentales con el fin de aplacar las llamas destructivas.
5. Medidas a tomar, pedimos al mismo tiempo, que toda ayuda tanto nacional como extranjera, sea manejada con total transparencia, eficiencia y prontitud, otorgando todas las facilidades para que la misma llegue a los destinatarios. También queremos recordar a la opinión pública, que la Iglesia Católica mediante CARITAS boliviana, tiene habilitada el número de cuenta 1000263725 en el Banco Nacional de Bolivia, disponible para quienes deseen efectuar aportes económicos; por otra parte, también pedimos a la ciudadanía en general a contribuir con su grano de arena con diversas instituciones gubernamentales, de policía y ejército quienes desarrollan campañas en favor de las zonas afectadas, ya que La Chiquitanía es nuestra, es de todos los bolivianos.
6. Urgente pedido, es nuestro deber velar por nuestro futuro y el de las próximas generaciones, en este sentido pedimos la derogación total del decreto supremo nº 3973, para evitar futuras catástrofes cometidas por la mano del hombre en esta zona importante para todo el planeta, también exigimos al gobierno nacional declarare las áreas de bosques afectados por el fuego como tierras de inmovilización, con pausa ecológica y absoluta prohibición de todo cultivo y extracción. Además se deben revocar de inmediato las autorizaciones de desmontes y chaqueos y, al mismo tiempo, hacer una auditoría técnica de las autorizaciones realizadas que permita sancionar legalmente a los responsables de esta catástrofe amazónica. Controlado este desastre, solicitar un plan sostenido y agresivo de reforestación de toda esta zona ya que la pérdida de selvas y bosques implica al mismo tiempo, “la pérdida de especies que podrían significar en el futuro recursos sumamente importantes, no sólo para la alimentación, sino también para la curación de enfermedades y para múltiples servicios” (LS 32).
7. Otras acciones a tomar, “Si los ciudadanos no controlan al poder político –nacional, regional y municipal–, tampoco es posible un control de los daños ambientales.” (L.S. 179) Como laicos católicos estamos llamados a formar parte activa de la política, para evitar y prevenir futuras catástrofes como la vive. Confiamos siempre en la providencia divina, y, seremos también parte activa en las vigilias de oración, adoraciones a Jesús Sacramentado y rezo de rosarios, para pedir a nuestro buen Dios que regale lluvia abundante en toda la zona de la Chiquitanía y el Chaco para aplacar las llamas voraces.

Colocando en manos de nuestro Señor Jesucristo y la intercesión de nuestra Madre María santísima, por sus hijos sufrientes y la naturaleza herida por la codicia de unos cuantos.

Por el Consejo Jurisdiccional de Laicos Potosí.

 

Erico J. Mostajo Velásquez

PRESIDENTE DEL C.J.L.PT

 

Celia Mendizábal L.

SECRETARIA DE ACTAS DEL C.J.L.PT

 

Carlos Cristian Pereira A.

VICEPRESIDENTE DEL C.J.L.PT

 

Carlos Duran Aracena

VOCAL DEL C.J.L.PT

 

Benjamín Acebey Villa

TESORERO DEL C.J.L.PT