La Gratitud es la memoria del Corazón

Arzobispado de Sucre/CEAS/23 de Abril de 2020//.- Amado pueblo de Dios en la Iglesia de Sucre, las Comunidades Educativas del Arzobispado de Sucre (CEAS) quieren compartir con ustedes la serena alegría que vamos a vivir el día de mañana. Sí, hermanas y hermanos, este 24 de Abril celebramos gozosos la fiesta de Santa María Eufrasia, fundadora de la congregación de Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor. Sus hijas llegadas a Bolivia nos han regalado la obra educativa del “Colegio Santa María Eufrasia”.

Celebramos así este 24 de abril, 102 años de una presencia eclesial que traduce la invitación de Santa Eufrasia: “Ámenlas, ámenlas mucho”, en una exhaustiva entrega por formar de manera integral a generaciones de señoritas que, tanto ayer como hoy, desempeñan con profesionalidad y calidad humana diferentes servicios a nuestra sociedad. Queremos agradecer así a nuestras profesionales en salud, educación, diversas ramas de ciencias económicas e ingenierías, entre tantas otras, a tantas de nuestras estudiantes que se dan por completo en el hogar y en el trabajo por ser noble testimonio de quien comprende que “Las grandes obras se elevan en medio de todo tipo de pruebas y trabajos”. Sabemos que lo hacen en silencio y en actitud humilde. Gracias por esto y por más.

El evangelio de este 24 de abril recuerda las palabras de los discípulos de Jesús cuando los insta a no dejar sin alimento a la multitud: “¿Qué es esto para tantos?” (Jn.6,9b). Solo tenían cinco panes y dos peces. Cierto es que en el contexto actual nuestros esfuerzos parecerán poco y aún más poco si el deseo es compartir, pero sentimos en el corazón que, si confiados escuchamos a Jesús, la alegría vendrá, cierto, tomará su tiempo pero vendrá. Para animar este tiempo, para ofrecer al mundo lo poco que podemos dar es que estamos ahí, todos quienes con Santa María Eufrasia reconocemos que “Una vida vale más que un mundo”.

No cerraremos estas líneas sin agradecer al Arzobispado, su Delegación Episcopal, las Religiosas del Buen Pastor, Dirección, personal docente y administrativo del Colegio, a nuestros Padres y Madres de Familia y, desde luego, a todas nuestras estudiantes y antiguas alumnas, por nutrir esta familia eufrasiana y por permitirnos celebrar juntos, desde casa, estos 102 años de vida. Que sean para Gloria de Dios y bienestar de la humanidad que nos llama a ser Don de Dios, signo de misericordia y paz.